Con más de dos meses y medio de retraso sobre la mejor de las planificaciones previstas por la organización de este blog, concluyo mi Trilogía de Medina Sidonia.
Después de haberos dado la tabarra sobre los archivos parroquiales y el Archivo Histórico Municipal de esta población gaditana es el turno del Archivo General de la Fundación Casa Medina Sidonia, ubicado en el Palacio de los Guzmanes de Sanlúcar de Barrameda, sede de la Fundación Casa Medina Sidonia.
Sobre este archivo circulan algunas leyendas urbanas, como aquella que cuenta que el investigador debe pernoctar en el hotel que ocupa parte del Palacio si su investigación va a llevarle varios días, o aquella que afirma que uno de mis profesores en la Facultad tiene vetada la entrada al mismo por pasar las páginas de un libro demasiado rápido. No puedo confirmar ni desmentir ninguna de estas historias pero sí puedo deciros que la hora del desayuno, en este archivo, es sagrada; y, qué mejor que hacerlo en la Cafetería Guzmán el Bueno, con vistas a los jardínes de Palacio.
Trabajar en este archivo es como volver al siglo XIX: los instrumentos de descripción son 20 tomos manuscritos, elaborados durante años por la Duquesa Roja, por lo que el investigador puede llevarse varios días consultando estos índices, en los que se anotaba al margen el título nobiliario o estado señorial al que correspondía, buscando documentos de su interés.
Nosotros ibamos casi a tiro hecho; no ibamos a hacer genealogía, los Medina Sidonia son muy conocidos; ibamos a buscar documentación sobre conventos de Sanlúcar de Barrameda para intentar seguirle la pista a un óleo de finales del siglo XVI: no era el primer presunto Caravaggio que intentábamos documentar.
Afortunadamente, existía un inventario, también manuscrito o mecanografiado, ya no lo recuerdo, específico de Sanlúcar de Barrameda, que había entrescado todos los expedientes y documentos relativos a esta villa ducal del centenar de inventarios manuscritos ya citados.
Teníamos indicios de que nuestra obra de arte podía proceder de algún convento sanluqueño por lo que comenzamos a revisar inventarios de bienes, de alhajas, de cuadros, de ornamentos sagrados y hasta de prendas de ropa… de todos los conventos, monasterios y hospitales habidos y por haber (el Carmen, la Merced, la Victoria, Madre de Dios, Regina, San Jerónimo, Santo Domingo, San Agustín, Capuchinos, Carmelitas Descalzos y también Calzados, Jesuítas…), casi todos del siglo XIX y realizados como consecuencia de la Desamortización. El resultado de la investigación está bajo secreto de sumario.
En resumen, este es sólo uno ejemplo de todo tipo de estudios (históricos y artísticos pero también genealógicos) que permite realizar la ingente documentación conservada en este archivo, «uno de los archivos históricos privados más importantes de Europa».
Felicidades. Una entrada muy interesante.