Archivos, 237 y 238: Archivos municipales de Cabezón de la Sal y Mazcuerras

Acabamos de entrar en el otoño y yo… sigo pensando en mi veraniega tournée por los archivos españoles. Hace un mes me encontraba en Cantabria, infinita, visitando los archivos municipales de Cabezón de la Sal y Mazcuerras.

El primero de ellos, el Archivo Municipal de Cabezón de la Sal, conserva(ba) muy pocos documentos anteriores al siglo XIX, tal y como consta en el catálogo-inventario de dichos documentos que puede consultarse en el propio archivo. No obstante, su atenta archivera municipal, Sonia Merino, me informó que el archivo había recibido una donación de un particular, como recoge esta noticia de 2011, de unas 10 cajas de documentos. Es decir, este archivo recibió en 2011 más documentos del Antiguo Régimen que los que el propio archivo conservaba. Entre toda esta documentación, además de varios padrones del Valle de Cabezón de finales del siglo XVII y del siglo XVIII y otros tantos de Mazcuerras de los siglos XVII (1639, 1651 y 1660), que no pude consultar por su mal estado de conservación y dado que se hayaban pendientes de restaurar, destaco, por su interés para la genealogía nobiliaria, tres expedientes de hidalguía: los de de Toribio de la Cuesta (1694), Juan de la Iglesia (1692) y Simón Cabo de Mercadal (1773).

Por otra parte, y dado que mi investigación tenía como objeto un personaje oriundo de la vecina Mazcuerras, pude confirmar que la información que brinda el Censo-Guía de Archivos del Ministerio de Cultura sobre el Archivo Municipal de Mazcuerras era veraz y que no existía en él documentación anterior al siglo XIX, cuando esta villa se segregó de la de Cabezón de la Sal: los amillaramientos comienzan en 1866 (el documento más antiguo de este archivo es el amillaramiento de dicho año), los papeles de contabilidad comienzan hacia 1867, el Registro Civil en 1871, y el padrón más antiguo es de 1930.
En estos casos en los que la investigación de los archivos parroquiales y municipales se encuentra agotada, y sin tener en cuenta la documentación que sobre alguna población o familia pueda existir en los Archivos Estatales, la única vía es la de los archivos notariales. Aunque sobre los protocolos del Distrito de Cabezón de la Sal, entre los que también se encontrarían los de Mazcuerras, poco o nada se sabe. Podría decirse aquello de «Se desconoce su paradero». Ni la archivera municipal de Cabezón de la Sal ni los archiveros del Archivo Histórico Provincial de Cantabria, archivo sobre el que ya escribí hace unos meses, pudieron confirmarme si existen o si se perdieron. Como no consta ningún incendio ni pérdida fortuita en el pasado es posible que, en el futuro, como han aparecido otros muchos documentos, aparezca este fondo, o parte de él, en casa de cualquier particular.
No perdamos la esperanza.